Explicación teológica: La fe católica afirma que existe un único Dios en tres Personas — Padre, Hijo y Espíritu Santo — que comparten la misma naturaleza divina. La Trinidad no es una doctrina aislada: condiciona la oración (bautismo, bendición), la misión (envío) y la vida sacramental (Eucaristía, sacramentos en nombre de la Trinidad).
Reflexión patrística: San Agustín y los Padres usaron analogías (amor, memoria, conocimiento; o amante-amado) para ayudar a comprender la relación intradivina, sin agotar el misterio.